¿Por qué no nos cansamos de comprar?
La Real Academia Española (RAE) define consumismo como la "tendencia inmoderada a adquirir, gastar o consumir bienes, no siempre necesarios".
Hoy en día, los individuos no compran únicamente por necesidad o solo cuando van al supermercado. La realidad es que ahora los usuarios están predispuestos a consumir en cuanto ponen un pie en la calle.
A través de factores como la publicidad intrusiva a gran escala o la
repercusión de las campañas de marketing gracias a Internet, los
ciudadanos están preparados para comprar en cualquier momento y lugar,
sin mirar demasiado si esos bienes son necesarios o no. El consumista no basa su felicidad en poseer bienes, sino en desearlos" algo que es "consecuencia de los incesantes mensajes que animan a buscar la felicidad y la realización personal a través de la compra".
Así, los expertos señalan que felicidad y comprar están directamente
relacionados, es decir, que la tendencia general es pensar que, a mayor
consumo, mayor felicidad. Diversos estudios subrayan que hoy en día, por norma general, para ser felices necesitamos poseer muchas más cosas de las que necesitaban nuestros antepasados.
La tendencia del consumismo actual tiene su razón de ser en la posesión y
acumulación de cosas y no sólo afecta a los consumidores más activos.
Si bien es cierto que la adicción a las compras es un problema grave
que, según diversos estudios, afecta a entre un 3% y un 7% de la población.
Mi opinión es que cada persona tiene todo el derecho y la libertad de comprar lo que quiera y lo que desee, pero si creo que deberíamos tener más control de nuestros gastos y saber cuando gastar y cuando no.
Comentarios
Publicar un comentario